El Madrid recogió ayer lo que lleva cosechando -o, "pidiendo" a gritos me atrevería a decir- desde hace ya bastante tiempo.
Cuando te acomodas en la ley del mínimo esfuerzo -con jactación incluida, también me atrevo a decir- se llega a un punto en que las cosas terminan por desmoronarse. Y , por descontado, la Juve no es el Betis. (Con todos mis respetos hacía ese club)
Parafraseando los recurrentes paradigmas del Madridismo; ¿cómo puede el "mejor club de la historia del fútbol" enorgullecerse de ganar jugando mal? Esto es, en muchas de las veces, ¿ ganar injustamente? ¿Cómo puede dicho club, ya digo, jactarse de haber ganado dos ligas jugando mal, de haberlas ganado en detrimento del también déficit de juego del resto de clubes?
A estas alturas no sorprendo a nadie si no me declaro Madridista, pero, perfectamente podría -¿debería?- este texto tener dicha autoría.
Y, no haya lugar a equívoco, hay diferencias entre un fútbol productivista y rasposo pero bien ejecutado y lo que lleva practicando el Madrid en los últimos tiempos.
Anoche, exceptuando a unos lúcidos Robben y Pepe y, al ya de santificación obligada, Van 'Gol', el Madrid fue un chiste. El centro del campo es un cúmulo constante de imprecisiones y de falta de claridad y creatividad, la invención de verticalidad implacable madridista del Marca tampoco existe por ningún lado, (Eso ó dichos expertos futbolísticos no han visto un partido del Chelsea, por decir uno, en años) el ritmo de juego es casi siempre intermitente y, debo subrayar, no se percibe una actitud depredadora que corresponda las expectativas que se le presuponen a un club como este.
Resumiendo, se echa en falta, aparte de otras cosas quizá más salvables, amor propio por jugar bien.
1 comentario:
no vi el partido señores, pero dudo mucho que el madrid jugara tan bien como quieren mostrar el marca y demases periodicos sensacionalistas.
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